Mercados l 19.08.25
ENTRE EL DÉFICIT Y LA INFLACIÓN: LA FED ENFRENTA SU MAYOR PRUEBA DE CREDIBILIDAD EN JACKSON HOLE

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La mayoría de los economistas coincide en que la clave estará en el informe de empleo de agosto y en los próximos datos de inflación, que llegarán antes de la reunión del comité de tasas de la Fed.
Los inversores llegan a la cumbre de Jackson Hole el próximo miércoles con una mezcla de euforia y escepticismo. Acciones, crédito, cripto y oro cotizan en máximos recientes (o cerca) en un contexto en el que los bancos centrales ya acumulan 88 recortes de tasas en lo que va del año, la mayor ola desde 2020.
Cabe recordar que, en el simposio que se hace en Wyoming, a orillas de las Montañas Rocosas, donde se reúnen presidentes de bancos centrales, ministros de finanzas, académicos e incluso algunos inversores institucionales no se toman decisiones formales, pero los discursos que se dan suelen anticipar el rumbo de la política monetaria en EEUU y en el mundo.
La expectativa dominante en el mercado es que la Reserva Federal (Fed) se sume en 2025 a esta tendencia global de flexibilización monetaria. Sin embargo, las valoraciones extremas en Wall Street y el debate sobre la independencia del banco central más influyente del mundo y su estrategia a largo plazo marcan un telón de fondo complejo. Según el último informe de flujos de Bank of America BofA, los mercados ”compraron el rumor” de una Fed más moderada: en la última semana ingresaron u$s 26.400 millones a acciones, u$s 25.900 millones a bonos y u$s 4500 millones a cripto, mientras que el oro también recibió u$s 2600 millones.
El apetito por riesgo contrasta con un dólar debilitado, que retrocede casi 10% en lo que va del año, y con un mercado de bonos soberanos cada vez más relegado frente a activos nominales como renta variable y crédito corporativo, destaca el gigante de Wall Street.
La narrativa que gana terreno en la bolsa estadounidense es clara: disrupción equivale a devaluación. La necesidad política de la Casa Blanca de generar un boom económico en 2025/26 para revertir la trayectoria del déficit y la deuda empuja a los inversores a descontar un dólar estructuralmente más débil, consigna el documento.
En ese escenario, el BofA ve como grandes ganadores al oro, a las criptomonedas, los commodities y los mercados emergentes, activos percibidos como cobertura frente a la inflación y la depreciación del billete verde.
El riesgo latente, según el BofA El riesgo está en las valoraciones. El S&P 500 cotiza a 22,5 veces ganancias esperadas, en el percentil 95 desde 1988, mientras que su múltiplo P/E histórico de 27,4x lo ubica en el percentil 98 desde 1900. A esto se suma un ratio precio/valor contable en récord de 5,3x, impulsado por la ola de asignaciones ”cualquier cosa menos bonos” y el boom de la inteligencia artificial. Jackson Hole, ¿qué hará Powell? El desafío de Jerome Powell en Jackson Hole es calibrar el mensaje: demasiado optimismo podría inflar aún más el riesgo y demasiado realismo podría frenar de golpe la dinámica de flujos, sostiene el BofA.
El mercado ya descuenta que la Fed bajará la tasa de los Treasuries a 5 años por debajo de 3,1%, nivel necesario para estabilizar los pagos de intereses del Tesoro, que ya rondan u$s 1,2 billones anuales, dice. Probablemente, Powell intente enfriar las crecientes expectativas de los inversores respecto de un recorte de tasas en septiembre, ya que el comité que fija la política monetaria sigue dividido sobre su próximo movimiento. Las revisiones que mostraron un débil crecimiento del empleo en el último informe laboral, junto con datos que indican que la inflación no se aceleró tan rápido como se temía, convencieron a los participantes del mercado de que Powell no podrá resistirse mucho más a un recorte.
También la presión constante desde la Casa Blanca y del secretario del Tesoro, Scott Bessent, elevó aún más las apuestas. Hasta ahora, la Fed ha mantenido las tasas estables en lo que va del año, preocupada por un eventual repunte inflacionario. Al cierre de la semana pasada, Bessent pidió abiertamente a la Fed bajar las tasas en 50 puntos básicos en septiembre como inicio de una serie de reducciones que llevarían el tipo de referencia a la baja en 150175 puntos básicos. Actualmente, la tasa de los fondos federales se ubica en un rango de 4,25%4,5%.
. Con datos de la Fed de Atlanta, el mercado asigna ahora un 65% de probabilidad a un recorte de un cuarto de punto en diciembre y un 15% a uno de medio punto. Pero Powell podría intentar moderar esas expectativas, advierten los analistas. El presidente de la Fed no quiere que el mercado asuma que el recorte ya está asegurado. En este contexto, la cita de Jackson Hole no es solo un evento académico: se trata de una prueba decisiva de credibilidad para la Fed. Lo que está en juego es si el banco central se consolida como garante de estabilidad, o si termina por validar la percepción de que la política monetaria estadounidense está atrapada entre las presiones de Wall Street y las urgencias fiscales de Washington.
El Cronista