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Dólar 29.04.24

Pierde frente al plazo fijo

Imagen de Dólar 29.04.24


A dos días de cerrar el primer tercio del 2024, el que apostó de inicio a la tasa en pesos obtuvo un alto rendimiento en dólares, del orden del 33%.
Tiempo de balances financieros con el cierre de abril. Claramente las inversiones en bonos y acciones dejaron un primer tercio del año de fiesta con alzas de 54% para el papel más querido por los ahorristas locales como el AL30. Pero para los más tradicionales, los cálculos se reducen a la elección entre el dólar y el plazo fijo. Aquí las diferencias fueron notorias con rendimientos de las colocaciones en pesos de 37% contra solamente un alza de 3% en el dólar libre o blue. Otras alternativas en pesos fueron aún superiores al dólar como el venerado plazo fijo UVA, restringido en cuanto a su plazo por el BCRA y también por su monto por las propias entidades.
¿Qué puede acontecer de ahora en adelante? Hay varios factores en danza. En primer lugar se ingresa en el trimestre de la dulzura o el `trimestre de oro` para el BCRA con la liquidación de los dólares de la cosecha de soja. Ello traerá calma al mercado, el BCRA acumulará reservas y por la vigencia del “dólar blend” (liquidaciones de exportaciones se hacen 80% al valor oficial y 20% al contado con liquidación), el dólar en la Bolsa estará en esa sintonía. En las operaciones a futuro en el Matba Rofex se anticipa subas de 5% mensual del dólar oficial frente al 2% mensual prometido (por ahora) por el BCRA.
Pero hay un interrogante superior. Desde que el BCRA bajó las tasas el jueves último, un plazo fijo rinde apenas 4% mensual. ¿Vale la pena asumir el riesgo por un rendimiento bajo en comparación al 9% de principios de año? En realidad, si el dólar se mantiene estable, un supuesto fuerte por cierto, ese 4% de ganancia es atractivo y es lo que se obtiene en Estados Unidos en casi un año. Hay que considerar igualmente que si se parte de una tenencia en dólares, la venta y posterior compra obliga a asumir una pérdida de 1% por la diferencia de cotización entre las dos puntas, compradora y vendedora por lo que el 4% de rendimiento se reduce a tres por ciento.
Y en cuanto a la estabilidad del tipo de cambio, entra en discusión el eventual atraso del tipo de cambio oficial. Aparecen primeros reclamos industriales respecto a los altos costos en dólares locales, por ejemplo en la industria automotriz. A ello apuntó la medida del Ministerio de Economía del viernes de reducir impuestos y aranceles al sector. El equipo económico es muy conservador en lo cambiado. Es lo que Guillermo Calvo definiera como “el miedo a flotar”, pero aplicado ahora a una economía “encepada”. El miedo a “desencepar”. Es altamente probable que subsistan cepos (a giros de utilidades y compras por atesoramiento) más allá de junio. Liberan en primer lugar el pago de importaciones. Por ello es que es de esperar que el plazo fijo gane al dólar, algunos meses más, pero ya por “1 a 0” y con algún gol en tiempo suplementario. Si el plazo fijo en pesos le sigue ganando al dólar ya será por la mínima diferencia o bien en tiempo suplementario.
El Cronista