Son unos US$ 9.500 millones utilizados por las compañías para saltar el cepo. El rulo financiero que el Gobierno salió a cortar el viernes pasado, en plena rueda cambiaria, amenazaba con sacarle reservas al Banco Central en la previa de las elecciones de octubre. El equipo económico detectó que del otro lado de esa operación financiera había empresas que estaban dolarizándose a pesar de que para ellas aún el cepo está vigente. La decisión de salir a ponerle un límite al arbitraje entre el dólar oficial y los financieros llegó en un contexto en el que el Ministerio de Economía busca concentrar la mayor cantidad de compras posibles para aumentar las reservas.
Clarín